¿CÓMO CONSEGUIR QUE LOS CONDUCTORES PRESTEN ATENCIÓN A LA AMORTIGUACIÓN DEL VEHÍCULO?
Los amortiguadores protegen tu vida en el vehículo, igual que un cinturón de seguridad.
Cada vez es más difícil convencer a los conductores de que el mantenimiento del vehículo es muy importante para la seguridad vial y que no sólo se deben de preocupar, cuando algo se rompe o cuando no pasamos la ITV.
El cuidado del vehículo debe ser una constante y hay determinados elementos que son fácilmente olvidados, sobre todo aquellos que no se ven.
No ayuda el entorno económico de crisis actual, en donde tendemos a aplazar aquello que no es inmediato o necesario. Por esta razón la revisión periódica del coche de demora, alargando el tiempo hasta que ya es irremediable tener que hacer frente a ella.
El envejecimiento del parque impacta igualmente en el gasto que están dispuesto a hacer los consumidores, se piensa que a vehículo más antiguo menos desembolso se está dispuesto a hacer. Cuando un vehículo es más antiguo tiene mayores deficiencias generales y compromete más la seguridad, por ello no deberíamos renunciar nunca a la calidad del recambio.
«El objetivo de la amortiguación del vehículo ¡no es el confort!»
Si preguntamos que es la amortiguación, probablemente la mayoría de los conductores la asocien al confort, si notamos más o menos los baches o esos “queridos” resaltos que encontramos frecuentemente en nuestras ciudades.
No somos conscientes de la importancia de una amortiguación en buen estado.
Pero ¡no! El objetivo de la amortiguación del vehículo ¡no es el confort! ¿Cómo?, ¿No?, ¿Y entonces cuál es?
Pues, como parte del sistema de dirección y suspensión del vehículo, el objetivo de la amortiguación es nuestra seguridad.
Los amortiguadores, entre otras funciones, son responsables de garantizar el contacto de los neumáticos con la superficie de la carretera en la proporción justa que asegure el máximo agarre, pero al mismo tiempo con la capacidad de asumir las irregularidades del firme y evitar una modificación inesperada de la trayectoria del vehículo.
Por eso el mantenimiento de los amortiguadores debería ser similar al que hacemos de los neumáticos, revisarlos cada 20.000 kilómetros y reemplazarlos cada 60.000 kilómetros o cada cinco años.
Todos los que trabajamos en el sector de la postventa somos conscientes de ello, no sólo de los amortiguadores, neumáticos, frenos, filtros, sistema de suspensión y dirección, aceite, escobillas, etc. Y es nuestra responsabilidad concienciar y convencer a los conductores. ¿Cómo? Muy sencillo, los amortiguadores protegen tu vida en el vehículo, igual que un cinturón de seguridad, igual que los frenos y los neumáticos (en estos productos parece que hay más concienciación.
¿Que otro argumento puede haber más relevante que proteger nuestra vida y la de los que nos acompañan?
- Si no están rotos ¿Para qué cambiarlos?
- Es que es carísimo.
- Mi coche es antiguo y no merece la pena cambiarlos.
Por nuestra parte, lanzaremos nuestros argumentos más poderosos:
- Es por tu seguridad y la de los tuyos.
- ¿Cuántos kilómetros has recorrido con esos amortiguadores? Pongamos que los 60.000 km recomendados, ¿Cuánto te ha costado por kilómetro? ¿0,5 céntimos? ¿Es caro?
- Precisamente porque tu vehículo es antiguo es necesario cambiarlos, a mayor antigüedad del vehículo mejor mantenimiento debe tener para garantizar la seguridad.
Desde Pemebla distribuimos la gama completa de amortiguadores de la marca Japanparts. Confiamos en esta marca porque sabemos que proporciona una relación calidad-precio que garantiza la seguridad de los usuarios ajustando el precio a lo que, en la situación actual, un conductor puede considerar como razonable.
Confiamos en que entre todos podamos inculcar en la sociedad la importancia del mantenimiento del vehículo. Es necesario invertir en un elemento que impacta directamente en nuestra seguridad y la de los demás, los amortiguadores.